Una vez más, Applus recurre a la mentira para intentar saltarse la negociación colectiva. Nada nuevo: su táctica es clara y repetitiva. Modifican condiciones laborales unilateralmente, negocian por separado con cada trabajador, y cuando las consecuencias aparecen, culpan al Comité.
Ejemplos no faltan:
- Cambios de horario que solo alargan la jornada.
- Reducciones en junio que trasladan la producción a agosto, con el pretexto de justificar las horas Flex.
- Nuevas fórmulas como el “Mac Auto” en pruebas, que pronto se convertirán en un nuevo problema para la plantilla.
Todo responde a una lógica bien conocida: repetir una mentira mil veces, hasta que parezca verdad.
Difamación para evitar cumplir
Applus no soporta que exista un sindicato que no puede controlar.
No les gusta que haya quien denuncie lo que ellos intentan ocultar, como la exposición a agentes cancerígenos en las estaciones de Iteuve en Barcelona.
Los tribunales han condenado a la empresa a aplicar medidas para eliminar esta contaminación, pero Applus sigue intentando esquivar la sentencia.
Como respuesta, han trasladado el conflicto al terreno de la difamación y el bulo, creyendo que, si lo repiten lo suficiente, el engaño funcionará. Pero no lo vamos a permitir.
El Tribunal ha hablado: la salud no se negocia
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya lo ha dejado claro:
Antes del 1 de septiembre de 2025, Applus debe garantizar:
- 5 minutos de aseo antes de comer
- 10 minutos de aseo antes de finalizar la jornada
Y todo ello dentro del horario laboral.
Applus, en lugar de asumir su responsabilidad, busca que sean los propios trabajadores quienes «propongan» cómo cumplir este mandato, preguntándoles de manera individual como lo harían ellos.
Pero su intención es evidente: quiere justificar el cumplimiento sin perder ni un solo minuto de producción y además haciéndote creer que han tenido en cuenta tus propuestas
No caigas en su trampa: ni un paso atrás
No se pueden modificar los horarios de los centros de trabajo unilateralmente.
No debemos aceptar acuerdos individuales.
No permitamos que la empresa use su poder para imponer cambios fuera del marco colectivo.
Que no te engañen: si aceptas, no estás colaborando, estás perdiendo derechos.
Seguiremos informando.